Queso empanado con salsa de membrillo. Juego de blogueros 2.0

Os comparto esta receta de tapeo y fiesta que es una auténtica delicia.




¿Quien dice que el membrillo no sea el ingrediente de una receta salada? eso es porque no han probado combinar un buen queso, paté o carne con salsas dulces como esta o manzana, boniato...
Son recetas de contrastes deliciosos que no debéis dejar de probar.
Los que aun no han comido cosas así y no se atreven que prueben con una simple tostadita o regañá con paté y algo de mermelada... no digo mas, ya me contareis.
Pues esta receta no es excesivamente de contrastes, quiero decir que la salsa no es lo dulce que me gustaría pero es la ideal para esta tapa, sale en su punto exacto de dulzor y la finura que le da ese vino lo completa del todo.
Por mucho que os cuente es mucho mejor que lo proveis.
Este mes en Juego de blogueros se propuso el membrillo, es fruta de temporada y aunque se le da pocas aplicaciones, la mayoría no salen del dulce de membrillo, tiene otras muchas que podéis ver entrando en los blog de mis compañeros de juego que os pongo abajo, no os lo perdáis.


Queso empanado con salsa de membrillo

Ingredientes: 

  • 250 gr de Queso manchego,
  • huevo y pan rallado (para empanar),
  • abundante aceite de oliva para freír el queso,

Para la salsa:

  • 2 membrillos,
  • Sirope de agave (1/4 del peso del membrillo limpio),
  • 1 cebolla,
  • 150 ml de vino Pedro Ximenez,
  • 200 ml de nata de cocinar,
  • cebollino picado.


Elaboración: 

Se trocea el queso al gusto, yo lo hice triángulos.


Se empana bien pasándolo 2 veces por huevo y pan rallado, en mi caso es pan rallado sin gluten (sería lo único que habría que controlar para que la receta sea sin gluten).


Se fríen en abundante aceite bien caliente hasta que estén dorados y con cuidado que no se rompan, como se ha empanado 2 veces solo hay que freírlos muy rápido, vuelta y vuelta.

Para la salsa:

Se ponen los 2 membrillos limpios y troceados en un cazo con el sirope de agave a cocer, se hacen en su propio jugo pero si se resecan mucho y aun no están cocidos se puede añadir un poco de agua caliente.




Mientras se hace el membrillo se fríe la cebolla picada hasta que se dore.


Se añade a la cebolla el membrillo cocido en el sirope y se termina de cocer todo junto.



Se añade el vino y se deja que se evapore el alcohol.


Se bate muy fino.


Se añade enseguida la nata y se deja reducir todo a fuego muy suave.



Se sirve con el queso recién frito y un poco de cebollino picado.






Nos vemos en el próximo juego, mientras disfrutad de las siguientes recetas de mis compañeros:

CONVERSAciÓN

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